Y qué hiciste del amor que me juraste
y qué has hecho de los besos que te di.
Y qué excusas puedes darme si faltaste
si mataste la esperanza que hubo en mí.
Y qué ingrato es el destino que me hiere
y qué absurda es la razón de mi pasión
y qué necio es este amor que no se muere
y prefiere perdonarte tu traición.
Y pensar que en mi vida fuiste flama
y el caudal de mi gloria fuiste tú
y llegué a quererte con el alma
y hoy me mata de tristeza tu actitud.
Y a qué debo, dime, entonces tu abandono
y en qué ruta tu promesa se perdió
y si dices la verdad yo te perdono
y te llevo en mi recuerdo junto a Dios.
Los Panchos
Ya es muy tarde para remediar
todo lo que ha pasado,
ya es muy tarde para revivir
nuestro viejo querer.
Es preferible para ti que olvides el pasado;
ya es muy tarde si tratas de volver,
eso no puede ser.
En muchas ocasiones te busqué
y a tus plantas de rodillas imploré;
ya no insistas en reunir tu vida con la mía;
ya es muy tarde si tratas de volver,
resígnate a perder.
Enrique Santos Discépolo
Cuando la suerte que es grela,
fallando y fallando te largue parao.
Cuando estés bien en la vida
sin rumbo, desesperao,
cuando no tengas ni fe,
ni yerba de ayer secándose al sol.
Cuando rajes los tamangos
buscando ese mango
que te haga morfar.
La indiferencia del mundo
que es sordo y es mudo recién sentirás.
Verás que todo es mentira
verás que nada es amor,
que el mundo nada le importa Yira... Yira...
Aunque te quiebre la vida
aunque te muerda un dolor
no esperes nunca una ayuda,
ni una mano, ni un favor.
Cuando estén secas las pilas
de todos los timbres que vos apretás
buscando un pecho fraterno
para morir abrasao cuando te dejen tirao
después de cinchar lo mismo que a mí.
Cuando manyes que tu lado
se prueban la ropa que vas a dejar
te acordarás de este otario
que un día cansado se puso a llorar.
Mario Gareña
Yo me llamo cumbia,
yo soy la reina por donde voy,
no hay una cadera
que se esté quieta donde yo estoy,
mi piel es morena
como los cueros de mi tambor,
y mis hombros son
un par de maracas que besa el sol (Bis)
Tengo en la garganta
una fina flauta que Dios me dio,
un canto de millo, olor a tabaco,
aguardiente y ron,
tomo mi mochila, enciendo las velas,
repica el son,
y enredo en la luna
y en las estrellas toda mi voz (bis).
Como soy la reina
me hace la corte un fino violín,
me enamora un piano,
me sigue un saxo y oigo un clarín,
y toda una orquesta
forma una fiesta en torno de mí,
y yo soy la cumbia,
la hembra coqueta y bailo feliz (bis).
Yo nací en las bellas
playas caribes de mi país,
soy barranquillera, y cartagenera,
yo soy de ahí.
Soy de Santa Marta,
soy montereana, pero eso sí,
Yo soy colombiana,
oh tierra hermosa donde nací (bis)
Y mis hombros son
un par de maracas que besa el sol,
y enredo en la luna
y en las estrellas toda mi voz
y yo soy la cumbia,
la hembra coqueta y bailo feliz
Yo soy colombiana,
oh tierra hermosa donde nací.
Yo no tengo a nadie
que me pueda aconsejar (bis)
Me enamoré, me enamoré
de una chica una vez
y como yo, y como yo no sabía que hacer
no me atreví ni a acercarme,
por no saber de que hablarle
yo la perdí para siempre
y ya no la he vuelto a ver más.
El conseguir que cuesta mucho luchar y sufrir,
un gran amor, una ilusión que me hacía feliz
pero no supe guardarla
y de mi amor se burlaba,
por no saber como amarla
yo no la he vuelto a ver más.
Guty Cárdenas
Yo sé que nunca besaré tu boca,
tu boca de púrpura encendida.
Yo sé que nunca llegaré a la loca
y apasionante fuente de tu vida.
Yo sé que inútilmente te venero
que inútilmente el corazón te evoca,
pero a pesar de todo yo te quiero,
pero a pesar de todo yo te adoro,
aunque nunca besar pueda tu boca.
Yo soy aquel que cada noche te persigue
yo soy aquel que por quererte ya no vive
El que te espera, el que te sueña
el que quisiera ser el dueño de tu amor.
Yo soy aquel que por tenerte da la vida,
yo soy aquel que estando lejos no te olvida,
El que te espera, el que te sueña
aquel que reza cada noche por tu amor.
Ya estoy aquí, aquí para quererte
ya estoy aquí, aquí para adorarte
ya estoy aquí, aquí para decirte
que como yo nadie te amó.
Yo soy aquel que por tenerte....
YO TAMBIÉN TUVE 20 AÑOS. (Bambuco)
José A. Morales
Yo también tuve 20 años
y un corazón vagabundo
yo también tuve alegrías
y profundos desengaños.
Yo también tuve 20 años
que en mi vida florecieron.
Veinte años que a mí llegaron,
se fueron y no volvieron.
Por eso desde la cima
de mis ardorosos años,
miro pasar hoy la vida
sin que me haga bien ni daño.
Porque tuve la fortuna
de vivirla sin engaño,
para contar sin nostalgia
que también tuve 20 años.